Durante mi formación en Psicología General Sanitaria, estudié los distintos tipos de infidelidad, y nunca leí el término Microinfidelidades y, sinceramente, me abruma la idea de minimizar las consecuencias emocionales que eso puede suponer para cualquier persona que está enamorada. Hace tiempo que hablé de ello en mi IG: ester_psicología_sexologia.
Hoy veo a una pareja y como siempre cuando pregunto por el motivo de consulta la es respuesta es; venimos porque tenemos un problema, bueno…. Ella/el yo no.
Y ya lo decía hace poco, en un WhatsApp viendo Netflix hay más infidelidad que en una noche de farras con los amigos.
A mí me pilla mayor para ciertas cosas y escuchar eso de…. “Micro infidelidad” llamemos a las cosas por su nombre. Infidelidad…. Dejemos de llamar a las cosas con cara de no haber roto un plato. Debemos hacernos cargo de nuestra responsabilidad afectiva.
Te lo dejo a ti, ¿eh? Cuando pongas nombre a una emoción a las cosas que te pasan: ¿Qué vas a decir? Estoy microfeliz. y después feliz… ¿Estoy “microtriste”?
Asumamos lo que sentimos y hagámonos cargo de ello desde la inteligencia emocional…
La infidelidad si puede ser de muchas maneras; fija (siempre la misma persona), plena (cuando se lleva a cabo de manera completa), esporádica (ocurrió sin esperarlo), doble vida (tener dos familias a la vez). La infidelidad es una felicidad pasajera, no lo olvides, y la realidad es que siempre hay que enfrentarse a una realidad que duele, y es; las cosas con tu pareja no van nada bien.
Pero por favor, las cosas como son: nada de micros.